El paisaje, la naturaleza y la ideología en María y De Honda a Cartagena
Por: Diana Alfonso
Durante el siglo XIX Colombia experimentó una fuerte tensión política entre los principales partidos existentes: liberal y conservador, la cual fue causado principalmente por el firme propósito de ambos bandos de construir la mejor nación posible a partir de sus ideas. Gracias a esto la literatura, tanto en libro como en prensa tomo gran importancia en todo el país, pues a partir de ella se difundían las ideas de cada partido, y se las mostraba al público de la mejor manera para ampliar el número de personas de acuerdo con cada ideología. Es dentro de este contexto que surgen obras como De Honda a Cartagena, escrita por José Maria Samper, y María,de Jorge Isaacs, uno de los clásicos colombianos del movimiento romancista latinoamericano. Dentro de ambas obras se pueden apreciar tanto temas comunes como distintas perspectivas sobre el papel que conllevan distintos elementos en la construcción de la nación. Uno de los puntos en el que aparentemente más difieren los autores, y en el que se va a centrar este ensayo, es la pareja conceptual paisaje-naturaleza.
Las ideas planteadas al respecto son interesantes, ya que en varias ocasiones se muestran opuestas a pesar de que ambos escritores hacían parte del partido liberal, esto se debe al modo en que cada uno quiere hacer propaganda de la ideología y el objetivo central de sus textos. Samper es explicito y señala constantemente como puede mejorarse la nación, mientras que Isaacs demuestra a través de las situaciones que ocurren en María que las medidas y acciones conservadoras no son funcionales. Sin embargo, la naturaleza juega un papel interesante y diferente en ambas obras, aunque hay aspectos que se comparten, como el que está presente constantemente, afecta emocionalmente a los narradores de cada relato, especialmente con sentimientos como la tristeza y la nostalgia, entre otros.
En primer lugar, esta De Honda a Cartagena, su autor, José María Samper, nació el 31 de marzo de 1828 en Honda y murió en Anapoima el 22 de julio de 1888. Se crio en una familia de clase alta, lo que le permitió tener una muy buena educación en muchos ámbitos diferentes e incluso realizar un viaje a Europa que contribuyo ampliamente a sus conocimientos. Además de destacarse por su labor como escritor y periodista, fue un conocido político colombiano que ejerció diversos cargos públicos. Su pensamiento tuvo un desarrollo interesante, pues inicio con un liberalismo radical que se fue aplacando a medida que avanzaba el siglo XIX, llegando incluso a defender unas pocas ideas conservadoras durante los últimos años de su vida.
Todo lo anterior esta reflejado en De Honda a Cartagena, pues allí narra en primera persona la primera parte de su viaje al viejo continente, en ella describe como debe partir de su hogar y seguir el curso del rio Magdalena para llegar al puerto en el que podría tomar el barco que lo llevaría a su destino final. Durante este recorrido conoce una gran parte del territorio en el que, por supuesto, predomina la naturaleza y que, si bien había estudiado, jamás había visto en persona. Uno de los aspectos que más resalta con respecto a la pareja conceptual es que Samper se esfuerza por asignarle a cada rio o material que encuentra una labor económica que podría ayudar al desarrollo del país, además de repetir varias veces que es necesario para los indígenas una "civilización" y educación para que puedan la pobreza y sus precarias condiciones de vida. Lo anterior se acompaña de la siguiente cita:
"De un lado el lujo de la naturaleza, indomable y grandiosa, perfumada y llena de misterio; del otro el lujo de la civilización, de la ciencia y la ostentación de la fuerza verdadera del hombre. Allá el hombre primitivo, tosco, brutal, indolente, semi-salvaje y retostado por el sol tropical, es decir, el boga colombiano (...) hijos más bien de la ignorancia que de la corrupción; y más acá el europeo, activo, inteligente, blanco y elegante, muchas veces rubio y con su mirada penetrante y poética, su lenguaje vibrante y rápido, su elevación de espíritu, sus formas siempre distinguidas." (Samper 386)
Gracias a las palabras del autor se hacen evidentes varias cosas. Entre las más destacadas esta la clara relación establecida entre los bogas y la misma naturaleza, los describe de un modo que hace que parezcan parte de esta, de modo que se vuelven tribus "salvajes" que necesitan ser educadas y apartadas de ese mundo maravilloso pero indomable. Además, esta la clara preferencia que tiene el narrador por el modelo de vida europeo, prestando especial atención a la industrialización, la cual puede dominar todo aquello que se considere natural y volverlo útil para la nación. También cabe resaltar que todas esas percepciones sobre la tecnología, la grandeza del hombre que logra manejarla y el ver a la naturaleza como un objeto que debe ser explotado, indican claramente un pensamiento liberal.
En cuanto al paisaje dentro del relato de Samper, este es presentado como todo aquello que es natural y que ya esta contribuyendo al desarrollo y crecimiento de la nación, en otras palabras, todo lo que el hombre haya logrado controlar o "domar" gracias a la ayuda de distintas maquinas. Dentro de este grupo está el mismo rio Magdalena, ya que este se utiliza ampliamente para el comercio y turismo, aunque también se encontrarían dentro de la clasificación "paisaje" las materias primas que se utilizan para distintos productos y los bogas o indígenas que dejaran atrás sus costumbres y tomaran un estilo de vida más citadino o europeo. Por otro lado, la "naturaleza" sería todos los lugares, animales o personas salvajes y en de algún modo desconocidos (parcial o talmente) para los ciudadanos, en síntesis, todo aquello que no pueda controlarse con una maquina creada a partir del conocimiento humano. Vale resaltar que para Samper lo natural es misterioso e incluso cruel, pero al mismo tiempo fascina, logra que se sienta intimidado, maravillado y atraído a descubrir sus secretos, en sus propias palabras:
"Confieso que en aquella escena salvaje, pero llena del encanto del encanto de la fe y la piedad, encontré más poesía y más religión que en los cantos del vapor Bogotá. (...) y yo encontraba en esa escena una grande impresión y enseñanza. La poesía es sin disputa la más sublime de las manifestaciones del alma en sus relaciones con Dios, el hombre y la naturaleza" (Samper 389)
Por lo que se refiere a María, es una novela escrita por Jorge Isaacs, él nació en Santiago de Cali el 1 de abril de 1837 y murió en Ibagué el 17 de abril de 1885, se destacó por ser poeta y novelista. La novela cuenta la historia de cómo Efraín siempre ha estado enamorado de su prima María, quien le corresponde, pero han sido criados como hermanos y, por lo tanto, no puede haber ningún tipo de relación entre ellos aparte de la amistad. Todo inicia cuando él regresa de Bogotá, y al poco tiempo su padre le informa que debe marcharse de nuevo a estudiar a Europa, con el poco tiempo disponible que tienen, ambos reafirman sus sentimientos por el otro, sin embargo, jamás llegarán a casarse, pues una enfermedad genética toma la vida de María antes de que Efraín pueda volver a casa. Pero, además del amor, hay otros temas centrales en la novela como el papel del padre y la madre en la familia, la nación, y la pareja conceptual paisaje-naturaleza.
Desde el inicio del relato es sencillo identificar el efecto que la naturaleza tiene sobre Efraín, pues apenas está llegando al valle del cauca se muestra maravillado por las montañas, ríos, etc, y comienza a recordar su niñez, especialmente los momentos al lado de María creando sentimientos de nostalgia y tristeza. Sin embargo, María tiene una relación mucho mas profunda con la naturaleza de la que tiene el protagonista, ya que en la mayoría de las ocasiones en las que aparece siempre tiene una flor en su cabello o se menciona junto al jardín, como si perteneciera allí e hiciera parte de las rosas y azucenas que cultiva. Otra de las pruebas de la innegable conexión de esta mujer con lo natural está en las palabras de Efraín
"A mí regreso, que hice lentamente, la imagen de María volvió a asirse en mi memoria. Aquellas soledades, sus bosques silenciosos, sus flores, sus aves y aguas ¿por qué hablaban de ella? ¿qué había allí de María, en las sombras húmedas, en la brisa que movía los follajes, en el rumor del río?" (Isaacs 36)
A partir de lo anterior, y de otros momentos similares en el libro, se puede afirmar que la biodiversidad que rodea a Efraín lo impulsa a pensar en María, así que es muy claro que ella en si hace parte de ella. En este sentido, si se ubica a esta joven dentro de la pareja conceptual paisaje-naturaleza sin duda es el paisaje, actúa como esa parte de la naturaleza que si es cercana a Efraín y que el definitivamente tiene al alcance.
Por su parte, la Naturaleza seria todo aquello que es hermoso, imponente y salvaje, pero mucho más lejano, algunos ejemplos claros en los que aparece este concepto están cuando el protagonista sale a cazar un jaguar junto a José y Braulio (Isaacs 80-84). Durante este episodio se muestra al animal como una bestia increíblemente poderosa que es muy difícil de vencer y, cuando se logra, cuesta la vida de varios perros de caza, lo que en realidad es un precio considerablemente alto por la piel de un animal de acuerdo con el contexto de la novela. Lo anterior es interesante porque permite ver que, a pesar de que la naturaleza sea enorme comparada con el hombre, si es posible vencer o dominar algunas partes de ellas, esta idea tiene un parecido relevante con las planteadas por Samper en su texto.
También vale la pena mencionar la ideología política del autor de María, ya que al igual que la de Samper, comenzó con el partido liberal y vivió en una época en la que la mayoría de las personas a su alrededor eran de la ideología contraria, ese ambiente se refleja de una manera muy clara en María, especialmente porque Efraín está en un ambiente parecido y María parece ser el modelo perfecto de mujer según el conservadurismo, es modesta, callada, maternal, creyente, entre otras características. Además, es interesante como en más de una ocasión a Efraín prácticamente le toca rogarle a María que lo mire a los ojos y le cuente como se siente, cosa que implica romper ese "protocolo" establecido de comportamiento. De este modo, a lo largo de la novela Isaacs introduce leve y cuidadosamente su desacuerdo con muchos de los postulados conservadores que se consideraban normales en la época.
Finalmente, ambos autores, aunque parten de un mismo punto de vista a nivel político y económico, logran exponer ideas similares en dos obras que parecen completamente opuestas en cuanto a ideología. Simplemente cada uno lo hace con diferentes niveles de sutileza para lograr cumplir con el objetivo del texto, utilizando ampliamente los conceptos de naturaleza y paisaje. En el caso de Samper, esa meta es asignarle explícitamente una labor a cada elemento natural para convertirlo en paisaje y que le sea útil a la nación. Y, para Isaacs, es mostrar su desacuerdo con las ideas contrarias a través de las características que les asigna a sus personajes, mostrando a Maria como mucho más que una mujer perfecta según el canon conservador; como alguien que es el paisaje y, por lo tanto, parte de la misma naturaleza.
Bibliografía
Isaacs, Jorge. María . Medellín : Editorial Bedout, 1985.
Samper, José María. «De Honda a Cartagena.» Museo de cuadros de costumbres tomo III. Bogotá: Biblioteca Banco Popular, 1973. 381-424.